Oh Dios de bondad y misericordia,
a tu guía paternal encomendamos nuestra familia,
nuestra casa y todos nuestros bienes.
Encomendamos todo a Tu amor y protección;
llena esta casa con tus bendiciones
así como llenaste la santa casa de Nazaret
con tu presencia.

Mantén lejos de nosotros, sobre todo,
la mancha del pecado,
tú solo reinas en medio de nosotros,
por tu santísimo amor y por el ejercicio
de todas las virtudes cristianas.

Que cada uno de nosotros te obedezca, te ame
y se proponga seguir en su propia vida tu ejemplo,
el de María, tu Madre y Madre nuestra amantísima,
y ​​el de tu intachable guardián, San José.

Protégenos a nosotros y a nuestra casa
 de todos los males y desgracias,
pero haz que siempre nos resignemos a tu divina voluntad, incluso en los dolores que te plazca enviarnos.

Finalmente danos a todos nosotros la gracia de vivir
en perfecta armonía y en la plenitud del amor
hacia nuestro prójimo.
Concede que cada uno de nosotros
merezca por una vida santa 
el consuelo de tus santos Sacramentos 
en la hora de la muerte.
 

Oh Jesús, bendícenos y protégenos. 
Oh María, Madre de gracia y de misericordia, 
defiéndenos del espíritu maligno, reconcílianos con tu Hijo,
encomiéndanos a su cuidado,
para que seamos dignos de sus promesas.

San José, padre adoptivo de nuestro Salvador,
guardián de su santa Madre, cabeza de la Sagrada Familia,
intercede por nosotros, bendícenos
y defiende en todo momento nuestro hogar.San Miguel, defiéndenos de todas las astucias malignas del infierno.

San Gabriel, haznos comprender la santa voluntad de Dios.
San Rafael, presérvanos de toda enfermedad 
y de todo peligro para nuestra vida.

Nuestros santos Ángeles Custodios, 
mantengan nuestros pies seguros
en el camino de la salvación, tanto de día como de noche.

Santos Patronos nuestros,
rogad por nosotros ante el trono de Dios.
Sí, bendice esta casa, oh Dios Padre, que nos has creado;

Oh Dios Hijo, que has padecido por nosotros en la santa Cruz, 
y Tú, oh Espíritu Santo, 
que nos has santificado en el santo Bautismo.
Que el único Dios en tres divinas Personas
guarde nuestros cuerpos,purifique nuestras mentes,
dirija nuestros corazones y nos lleve a todos a la vida eterna.
¡Gloria al Padre, gloria al Hijo, gloria al Espíritu Santo! Amén.